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El Compos trata de reaccionar a su crisis de resultados cambiando al cuerpo técnico y dirección deportiva

 La pésima imagen y resultados y el enfado de la grada se lleva por delante a los principales responsables de la parcela deportiva

Se acabó la paciencia en San Lázaro. Tras transmitir la idea de un proyecto ambicioso y el objetivo del ascenso en verano, la afición se encontró con una realidad bien distinta, con un equipo que no jugaba a nada, sin alma, sin gol, y con unos resultados tan malos que lo han llevado a puestos de descenso. El enfado iba en aumento y la tercera derrota consecutiva en casa ha sido la gota que colma el vaso. Así, el conjunto blanquiazul no quiso perder un minuto más y anunció en el día de ayer varios ceses de un plumazo: entrenador, segundo entrenador, preparador físico y director deportivo.

La figura de Manuel Castiñeiras llevaba ya un tiempo en el ojo del huracán. Seguramente, desde que se posicionó en contra de la operación de venta del club a Jota. Se le ha acusado de renovar constantemente a futbolistas por amistad personal cuando el rendimiento deportivo no justificaba tales decisiones. Y el papel que jugó en la destitución de Fabiano supuso también una importante mancha en su historial. Aunque probablemente, su apuesta por Manel Menéndez es la que más ha pesado en su "cese de mutuo acuerdo". Una apuesta que no fue muy comprendida entre la afición y que se achacó a su relación personal con el asturiano, con el que compartió vestuario en el Eibar. La hinchada esperaba otro perfil más orientado al ascenso, y no tanto el de un entrenador acostumbrado a primar el juego defensivo en equipos de mitad baja de la tabla. Y el problema es que los resultados, y la imagen, no le han dado la razón al ya ex director deportivo. Ni en el entrenador ni en la confección de la plantilla. Por lo tanto, su larga etapa en la SD ya es historia.

Y aunque las miradas, y los cánticos en el estadio, apuntaban a Castiñeiras como principal responsable, lo cierto es que Manel no tenía la confianza del público. Desde que tomó las riendas del club no ha ofrecido ningún argumento al que aferrarse y en el club prefieren dar un cambio de timón cuanto antes que pueda salvar la temporada.

Y si había otra persona que no contaba con el beneplácito general de la grada, era Cardeñosa. En este caso, también por sus maniobras para destituir a Fabiano la temporada pasada. Su cese, y el del preparador físico, fue acordado junto con el de Manel por lo que el próximo entrenador podrá traer a su staff de confianza.

De momento, el entrenador del equipo juvenil Antón Permuy se hace cargo de forma interina del puesto de técnico y Víctor Pazos, el coordinador de la cantera, hace lo propio con el de director deportivo.

Para el banquillo, el usuario e X Tribuneiro, que adelantó los ceses de Manel y de Castiñeiras, asegura que en la terna de posibles sustitutos se encuentran Fabiano Soares, José Luis Lemos y Míchel Alonso.