La SD
Compostela tiene ya a su nuevo entrenador. Desde el momento en el que el club
sospecharon las intenciones de Yago Iglesias de buscar nuevos retos, en la
dirección deportiva sólo contemplaron un nombre para sustituirlo: Rodri Veiga.
Si Yago no seguía, el elegido sería su hombre de confianza.
Rodri Veiga llegó en el mismo verano que
Yago Iglesias, en 2016, para asistirle como segundo entrenador, y desde
entonces, han compartido todas las alegrías, penas, éxitos y fracasos del
Compostela en estos últimos cinco años. Esto hace de Rodri el mejor conocedor
posible de la forma de trabajar de estas temporadas, de la plantilla, filosofía
y proyecto.
En cualquier caso, ya antes de aterrizar
en San Lázaro aquel verano de 2016, ya se podía considerar a la SD Compostela
el equipo de Rodri. Formó parte de las categorías inferiores, del filial y del
primer equipo, con quien llegó incluso a competir en Segunda División. Con éste
llegó a jugar 82 partidos, que son sólo una pequeña parte de su dilatada
carrera, que no terminó hasta cumplir los 39 años, a los que todavía se
mantenía como titular en Tercera División. De hecho, su intención era seguir
jugando, pero cuando el de Barco de Valdeorras recibió la llamada del
Compostela, no pudo decir que no. Al igual que ahora, 5 años después, en los
que decide desligar su futuro del de Yago Iglesias para permanecer unido al de
su Compos. Sólo que ahora, lo hará asumiendo la máxima responsabilidad.
En su presentación, Rodri manifestó su
enorme ilusión por el reto en el que considera "su equipo". Firma por
una temporada.
Ahora que el Compostela tiene ya su base,
se espera que más pronto que tarde empiece el trabajo en las oficinas de San
Lázaro, y se trate de acometer las primeras renovaciones o por el contrario, se
vayan conociendo las primeras bajas.